La colección completa de Chanel para esta primavera-verano 2014 augura una reminiscencia por la estética clásica de la casa francesa.
Cada una de las 75 piezas diseñadas guarda una cómplice relación con los íconos que Cocó supo hacer valer a principios del siglo pasado.
El tweed, los conjuntos de pollera y chaqueta, las perlas, las camelias, los botones, las carteras 2.55 con correa de cadena, los zapatos bicolor, cada uno de estos ítems aparecen en la colección que se pudo ver en el Grand Palais de París en el último Fashion Week.
Y esta vez, la novedad sin dudas fue dada por el colorido de cada una de las prendas, con rayas y degradé estilo Pantone que resaltan sobre blanco, mucho fucsia y violeta, y el estampado cuadrillé que homenajea a la Escocia que vio nacer el tweed.
El blanco y el negro, dúo mágico e indiscutiblemente intrínseco a Chanel, también se vio sobre la pasarela con esfumados en vestidos y polleras que generan dibujos y estampas que no se pueden encontrar en otras colecciones.
Y de manera original Lagerfeld también se suma a la silueta cocoon, con chaquetas similares al vestido capa que supo popularizar Valentino.
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