En cuanto a los invitados a la ceremonia
real, tanto el círculo más cercano a la pareja como las principales estrellas
de Hollywood supieron respetar la etiqueta, que establece para un evento al
mediodía como este, mujeres con faldas hasta la rodilla, colores claros,
sombreros o casquetes, cabello semi recogido y calzado de taco medio, y hombres
con jaquet o trajes grises.
La reina Isabel II, como ya nos tiene acostumbrados,
se jugó por la energía de los colores chillones. Eligió un vestido estampado
con flores violetas y verdes y un tapado verde limón de Stuart Pavin. Mención
aparte merece el sombrero verde que contrasta a la perfección con las plumas
violetas e incrustaciones al tono.
Kate Middleton lució un vestido de Alexander McQueen
abotonado den la parte delantera en un color amarillo pastel tan sutil que por
momentos parecía blanco. Completó el look con un tocado de Philip Treacy y
stilettos al tono y el cabello suelto. Su esposo, el príncipe William, que fue
el padrino de la boda, optó por acompañar a su hermano luciendo el traje de
gala del ejército del aire Blue and Royal. Sus
hijos Charlotte y George (Louis es aún muy chiquito para presentarse en este
tipo de eventos) han sido, respectivamente, dama de honor y paje de la
ceremonia.
La pareja conformada por el príncipe
Carlos y Camila Parker Bowles fue una de las más correctas de la velada. El
padre del novio optó por un traje gris y su esposa por un conjunto rosa
empolvado de Anna Valentine y un sombrero de plumas de Philip Treacy que quizás
era demasiado voluptuoso para la ocasión.
La madre de la novia, Doria
Ragland, ha elegido un vestido de color menta de Oscar de la Renta acompañado
de un abrigo del mismo color, ambos con flores blancas bordadas en la parte
inferior.
Una de las mejores vestidas del
evento fue Lady Kitty Spencer, sobrina de Lady Di, modelo e influencer. Su look
estuvo firmado por los italianos Dolce & Gabbana y cumplía con todas
las reglas que pide la etiqueta. Se trata de un vestido línea A en color verde
esmeralda que contrastaba a la perfección con las flores pintadas en tonos
amarillos y naranjas de la pollera. El escote cuadrado y las mangas tres
cuartos daban el toque formal y elegante que ameritaba la situación y se
completan con las sencillas joyas de Bulgari. El tocado del mismo color del
vestido y los zapatos naranjas son los accesorios más it y correctos que
pudo haber elegido.
Entre las celebrities, hubo dos
parejas que sin dudas se destacaron por sus looks. David Beckham de impecable
jaquet by Dior Homme y Victoria con un traje azul marino de su autoría,
muy oscuro para la ocasión, pero nada criticable. Y George Clooney con un traje
gris y la espectacular Amal con un look años 40 sencillamente impresionante,
eligió a Stella McCartney y un vestido asimétrico amarillo fuerte (uno de los
colores más usados en el evento) que completó con un tocado al tono de Stephen
Jones y stilettos dorados.
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