Todos conocemos de alguna manera u otra a Lady Di, ya
sea por su matrimonio con el Príncipe Carlos de Gales, por su devoción por sus
dos hijos, por su dedicación a las obras humanitarias, por codearse con las más
trascendentes personalidades del mundo o por su trágico final.
Lejos de tener final feliz, su corta historia nos
dejó un saldo positivo, haber conocido a una mujer que se convirtió uno de los
más importantes íconos de la moda.
Referente indiscutido de los años 80, fotografiada
por Mario Testino y codiciada por diseñadores de la talla de Dior, Chanel,
Versace y Valentino, se la recuerda por su estilo elegante y sencillo y por
algunos tips de moda con los que hizo historia.
Su cabello corto y rubio es un ítem con el que logró caracterizarse como una mujer moderna y emprendedora
El
look azul con el que se vistió para
su compromiso con el Príncipe Carlos dio que hablar. Eligió un traje de
chaqueta con hombreras hasta la cintura con ondas en el cuello, pollera tableada
y camisa de seda blanca con estampa de pájaros y un lazo anudado en el cuello.
Para
sella su amor, el Príncipe Carlos le obsequió una sortija de Garrad que tenía
un zafiro oval central de 18 kilates
salpicado de brillantes, rodeado de 14 diamantes y engastado en oro blanco, el
mismo con el que su hijo Guillermo le pidió matrimonio a Kate Middleton.
Para celebrar su compromiso se hizo una fiesta en el que usó un vestido largo de chiffón con escote
corazón, diseñado por Elizabeth y
David Emanuel, que llamó la atención por ser negro, un color hasta entonces reservado para el luto en la Realeza.
El
vestido que usó para su casamiento con
el Príncipe Carlos de Inglaterra fue el más famoso de la historia. Diseñado por
Elizabeth y David Emanuel, tenía grandes mangas largas y abullonadas, escote en
V y una larga cola de 8m.
Para
los actos oficiales y para mostrarse en público de día elegía vestirse con tailleurs o vestidos de los más
reconocidos diseñadores. Siempre elegía los tonos pasteles como el rosa, el
lila y el verde, además del blanco y el natural. La mayoría de sus vestidos
tenía escote redondo. Este atuendo fue uno de sus looks distintivos, que la
hacía lucir elegante y sencilla.
Para
la noche, su debilidad eran los vestidos
largos, strapless o con escotes originales, como el que utilizó durante una
visita a la Casa Blanca
de Estados Unidos donde bailó con John
Travolta las canciones de Grease y Fiebre de Sábado por la noche. Era un
vestido escotado de terciopelo azul de Victor Edelstein.
De
día o de noche, en su look siempre estaban presentes las mangas abullonadas,
muy grandes y con hombreras, características de la década de los 80.
Para
la comodidad del hogar elegía pantalones
rectos, camisas y suéters con arabescos y bordados de animales, como se usaban
en ese momento.
Diana
tenía una gran debilidad por las joyas
y era muy común verla con pulseras, anillos, collares y aros, todos muy
clásicos y para nada recargados. Sus preferidos siempre fueron los collares de
perlas de 1 o 2 vueltas, aros labrados en oro y anillos engarzados con piedras
preciosas.
Usaba
frecuentemente una Tiara que le
obsequió la Reina
como regalo de bodas, conocida como la
Tiara de los enamorados de Cambridge.
Los
accesorios también eran sus aliados y para los días soleados lucía bellos sombreros. En una época usó sombreros
chicos, casquetes y algunos apliques, y también se animó a usar otros más
atrevidos, de ala ancha, con adornos y cintas. La mayoría eran de colores
pasteles o blanco pero también usó otros de colores más llamativos o
combinados, siempre a tono con el atuendo.
Su
cartera preferida era la Lady Dior, diseñada
especialmente para ella. Es una cartera de estructura cuadrangular, está hecho
en piel de cordero acolchada y tiene dos asas cortas y planas de las cuales
cuelgan las letras que forman la palabra Dior. Diana la usaba en todos sus
variedades combinándola siempre con el atuendo que llevaba.
Sin lugar a dudas Lady Di fue una de las Damas del Estilo en los 80 y 90...
ResponderEliminarbolsas de piel
bolsas